Y aquí está el nuevo Sportage, recién bajado del camión y tras haber recibido un lavado para ingresar en la exposición de Kia Mas Motor, concesionario oficial Kia del Grupo Meuri.
Para empezar, vemos que los espacios se han ampliado de modo ostensible. Hay más sitio para la cabeza, para las piernas del conductor y, sobre todo, para los ocupantes de las plazas traseras, que ahora se pueden estirar más que en el modelo anterior.
Su frente, con esa característica Digital Tiger Nose, muestra una parrilla que conecta los grupos ópticos con un atrevido diseño de rejilla. Los propios grupos ópticos, Matrix LED, tienen ahora forma de bumerán y se fugan por los costados mientras en la delantera se enfrentan por sus ángulos. Esta líneas que recorren los costados, se unen ahora en las luces traseras, de diseño horizontal, y dan al Sportage una firma óptica inconfundible. La trasera transmite ahora una gran amplitud basada en la limpieza de sus líneas.
Las ruedas, que ahora van de 17 a 19 pulgadas según las versiones y modelos, pueden optar entre 6 formatos diferentes, según el color, al material y el diseño.
Sin embargo, donde más sentimos ese nuevo concepto de Kia, es en el interior. El Sportage tiene un habitáculo espacioso, limpio de líneas, accesible y alejado de elementos superfluos. Dicho de otro modo: tienen lo que tienen que tener donde lo tiene que tener. No puede haber explicación más sencilla.
La instrumentación para el conductor y el infoentretenimiento estás integrados en un amplio panel elegantemente curvado. Son dos pantallas de 12.3 pulgadas que nos recuerdan mucho al EV6. La claridad, la nitidez, de la pantalla de instrumentación del conductor es proverbial. Un display de cristal líquido de última generación que ofrece gráficos claros y nítidos, al nivel de una pantalla de juegos. En cuanto al panel de infoetretenimiento es un ejemplo que agilidad de la pantalla táctil y de buen criterio en cuanto a lo que ofrece. Kia ha sacado de dicho dispositivo ciertas funciones que solo podría contribuir a distraer al conductor, y las ha ubicado en un control “tradicional”, justo debajo. Así se evitan descuidos al volante.
Nos toca ahora hablar de los propulsores, confiando en que haya quedado claro que no vamos a hablar autonomía al tratarse de un híbrido y no un eléctrico puro. La potencia combinada entre el motor eléctrico y el térmico alcanza los 230 CV. Esa potencia se trasmite a través de una caja automática de seis velocidades que es accesible a través de un controlador circular que se escamotea con el motor parado. Y como extra, la tracción a las cuatro ruedas está disponible como opción.
En cuanto a la sensación al volante es de destacar la suavidad. Cristales amplios para facilitar la visión, un tacto de los materiales que se hacen a la mano al instante y una respuesta al pedal suave, pero firme al mismo tiempo.
Pero no es necesario creer esto último cuando se tiene la oportunidad de verlo (y tocarlo) en vivo y en directo. Este nuevo Kia Sportage ya está en los concesionarios oficiales Kia del Grupo Meuri. Es tan sencillo como acercarte a Kia Mas Motor en Erandio, (Calle Ribera de Erandio, 5, junto al puente de Rontegui), en Barakaldo (Ibaibe Kalea, 29, B3), en Bilbao (Calle Sabino Arana, 30) , en Matiena-Abadiño (Calle Murueta 3) o en Iurreta (Barrio Arriandi 10).